viernes, 22 de septiembre de 2017

Qué somos los catalanes

Somos honrados, cumplidores y solidarios. Somos acogedores, generosos e integradores. Somos moderados, somos un ejemplo de convivencia ciudadana. Cuando estamos convencidos somos tercos, tenaces y tenemos sentido común. Somos prudentes, pacíficos, pacifistas y tranquilos. Somos valientes, fuertes y pragmáticos. Somos pacientes, respetuosos y comprensivos. Somos conservadores entendiendo que debe haber cambios para evolucionar. Somos capaces de crear riqueza porque somos estudiosos y trabajadores, emprendedores, creativos, avanzados, eficaces y eficientes. Somos bilingües, sin contar otros idiomas que también hablamos. Somos viajeros y originales. Tenemos científicos, médicos, arquitectos, pintores, escultores, cantantes, músicos, intérpretes, payasos, restauradores, deportistas, cooperantes solidarios, reconocidos en todo el mundo. El músico e intérprete más universal, Pau Casals, en su discurso de agradecimiento a la Medalla de la Paz que el secretario general de las Naciones Unidas le entregó en 1971, dijo, emocionado, que era catalán y que Cataluña había sido la nación más grande del mundo porque tuvo el primer Parlamento democrático mucho antes que Inglaterra y fue la que acogió el inicio de las Naciones Unidas, en el siglo undécimo, cuando sus autoridades se reunieron en una ciudad de Francia, antes catalana, para hablar de la paz en el mundo. No somos violentos, ni bravucones, ni fanfarrones, ni mentirosos, ni provocadores, ni delirantes, pero tampoco somos ingenuos. No, la convivencia no está en peligro en Cataluña, estad tranquilos.

traducción al castellado del artículo publicado en el semanario El 3 de vuit

Què som els catalans

Som honrats, complidors i solidaris. Som acollidors, generosos i integradors. Som moderats, som un exemple de convivència ciutadana. Quan estem convençuts som tossuts, tenaços i tenim sentit comú. Som prudents, pacífics, pacifistes i tranquils. Som valents, forts  i pragmàtics. Som pacients, respectuosos i comprensius. Som conservadors entenent que hi ha d’haver canvis per evolucionar. Som capaços de crear riquesa perquè som estudiosos i treballadors, emprenedors, creatius, avançats, eficaços i eficients. Som bilingües, sense comptar d’altres idiomes que també parlem. Som viatgers i originals. Tenim científics, metges, arquitectes, pintors, escultors, cantants, músics, intèrprets, pallassos, restauradors, esportistes, cooperants solidaris, reconeguts arreu del món. El músic i intèrpret més universal, Pau Casals, en el seu discurs d’agraïment a la Medalla de la Pau que el secretari general de les Nacions Unides li va lliurar el 1971, va dir, emocionat, que era català i que Catalunya havia estat la nació més gran del món perquè va tenir el primer Parlament democràtic molt abans que Anglaterra i fou la que va acollir l’ inici de les Nacions Unides, al segle onzè, quan les seves autoritats es van reunir en una ciutat de França, abans catalana, per parlar de la pau en el món. No som violents, ni bravucons, ni fanfarrons, ni mentiders, ni provocadors, ni delirants, però tampoc no som ingenus. No, la convivència no està en perill a Catalunya, estigueu tranquils. 

article publicat al setmanari el 3 de Vuit

viernes, 8 de septiembre de 2017

Les masses empatxen

Sí, les masses empatxen, no hi ha temps a digerir-les. Qui no s’ha empatxat amb fruits secs, en no parar d’ingerir un darrera l’altre, penedint-nos al primer escalfor d’estómac. Passa amb la matxacada de futbol que ens tenen habituats tots els mitjans cada dia de la setmana, parlant de quina és la fitxa preuada de tal o qual jugador, què xiulen els àrbitres, que si la lliga, la Champions, la copa, com si no hi hagués cap altre esport en el món. I les converses de castellers que no empatxen, parlant de si carregaran el 3 de deu amb folre i manilles, de si el pilar de 10 ha estat descarregat o no, de si la torre de vuit era neta. El que agrada a uns a d’altres cansa. Un bocí de xocolata negre presa en un moment de cansament aixeca l’ànim a qualsevol, però si ens prenem tota una tableta, excita més que una dotzena de cafès i et fa un racó, difícil d’eliminar, al budell. I tantes i tantes coses que trobes arreu malgrat no ho vulguis veure. Ens hem polititzat ens agradi o no. Ara toca moments confusos que a molta gent no agrada per la crispació i per l’enfrontament de parers. Però malgrat el seu empatx, es preferible al silenci de quan érem joves il·lusos, preocupats tan sols del nostre mal de panxa. Vivim creant una societat pel futur dels nostres fills i nets. Depèn de si girem la cara o no cap un altre cantó, haurem format part de la història del nostre país. Diguem la nostra, malgrat sigui una empatxada.
columna publicada al setmanari el 3 de vuit 

lunes, 4 de septiembre de 2017

Innovación

Cambiar, adaptarse, mejorar, verbos comunes antes del de Innovar del cual las empresas que piensen en futuro deben mentalizarse a utilizar. Pero qué es innovar? Los paradigmas de la sociedad han cambiado. Antes la fidelización a personas y empresas era una constante, ahora se considera un signo de poca experiencia. Los jóvenes de hoy, si trabajan, no se conforman a seguir demasiados años en un mismo lugar, los atraen nuevos proyectos. Después de tres revoluciones industriales, hemos entrado en la cuarta donde todo es inmediato, rapidísimo, instantáneo. Todo es volátil, incierto, complejo y ambiguo. Esto es lo que se llama entorno VUCA, por sus siglas en inglés. Las empresas deben adaptarse a este ritmo trepidante de cambio, ya que, según Jack Welch, si el entorno va más deprisa que la misma empresa, el final está a la vista y la única pregunta que tienes que hacerte es: cuando se producirá? Esto es innovar. La primera revolución, 1750 vino marcada por la máquina a vapor, el cambio de agricultores y ganaderos a manipuladores de máquinas accionadas por energía, la aparición de nuevas materias primas como el algodón y el hierro, desarrollando la industria textil y la construcción de los ferrocarriles. La segunda, de la mitad del siglo XIX hasta la I Gran Guerra, en Cataluña aparecieron sectores como el eléctrico, la construcción y la metalurgia que se vio favorecida por la repatriación de capitales ganados en las colonias por los "indianos".
Me atrevería a decir que la tercera revolución llegó a finales del siglo XX con la tecnología de comunicación por Internet y las nuevas fuentes de energía renovables. Recordáis el antes y el después de las Olimpiadas del 92? La estación de telecomunicaciones para retransmitir los juegos nos permitió dar un salto inimaginable. Ahora ya estamos en la cuarta revolución donde todo es posible. Ya no hace falta ser adinerado para poner un negocio en marcha. Hace falta imaginación, inventiva, creatividad y preparación. Y con la globalización, los jóvenes recién salidos de las universidades comienzan negocios casi como un juego y los hacen rentables como nunca hubieran soñado. Se refiere a las redes sociales, la robótica, las aplicaciones en los móviles, el comercio en línea, etc. La mayoría de las start-ups, empresas de nueva creación con grandes posibilidades de crecimiento y fuerte componente tecnológico relacionadas con el mundo de Internet y las TICs, utilizan otras nuevas formas de financiación al margen de las entidades financieras tradicionales. Crowdfounding, a través de una plataforma, el emprendedor logra en un tiempo acotado la financiación de un colectivo de gente que se unen a cambio de algo simbólico, haciendo posible la ejecución de su proyecto. Playfunding, los emprendedores subirán su proyecto, manteniéndose a la espera de que una empresa los "patrocine". Crowdlending, mediante páginas avanzadas en el crowdfunding, las empresas ofrecen una rentabilidad o un tipo de interés alto a los inversores potenciales.

Crowdsourcing, en una Marketplace, las empresas abren una convocatoria sobre una tarea específica a un número indeterminado de personas, y pueden elegir los más apropiados para desarrollar esa tarea. Ya no vale seguir en la zona de confort. Ya no se puede vivir pensando que vamos a mantener el estatus para siempre. Tenemos que estar abiertos al cambio y si puede ser, debemos promoverlo para no quedarse atrás y ser tragados en el camino. Ahora cualquier invento está a disposición de todo el mundo, se comparte, ayuda a crear otros nuevos, no como antes que se guardaban como secreto con llave. Ninguna industria se escapa al cambio y las oportunidades son infinitas. Sólo hay límites a nuestra mente. Es por ello que las empresas que trabajan con equipos pequeños, con mentalidad abierta y cohesionados, creativos y con un liderazgo innovador, explorando nuevas expectativas, sin olvidar el funcionamiento del día a día, son las que podrán salir adelante. La población no crece en todo el mundo, envejece y los gobiernos son incapaces de solucionar el problema que ya se ha planteado con un paro en alza y unas pensiones no garantizadas a la baja. Los directivos formados bajo principios de estrategia pensada para organizaciones verticales y orientadas al control, al mando y en la obediencia, que reproducen estructuras militares, fueron un paradigma que dio la dirección clásica de la era industrial. Hoy las direcciones empresariales están recibiendo un giro sin precedentes. La innovación conlleva esfuerzo, por supuesto, pero también oportunidades.

traducción de 3 columnas de artículos en el semanario el 3 de vuit