Cambiar, adaptarse, mejorar, verbos comunes
antes del de Innovar del cual las empresas que piensen en futuro deben
mentalizarse a utilizar. Pero qué es innovar? Los paradigmas de la sociedad han
cambiado. Antes la fidelización a personas y empresas era una constante, ahora
se considera un signo de poca experiencia. Los jóvenes de hoy, si trabajan, no
se conforman a seguir demasiados años en un mismo lugar, los atraen nuevos
proyectos. Después de tres revoluciones industriales, hemos entrado en la
cuarta donde todo es inmediato, rapidísimo, instantáneo. Todo es volátil,
incierto, complejo y ambiguo. Esto es lo que se llama entorno VUCA, por sus
siglas en inglés. Las empresas deben adaptarse a este ritmo trepidante de
cambio, ya que, según Jack Welch, si el entorno va más deprisa que la misma
empresa, el final está a la vista y la única pregunta que tienes que hacerte es:
cuando se producirá? Esto es innovar. La primera revolución, 1750 vino marcada
por la máquina a vapor, el cambio de agricultores y ganaderos a manipuladores
de máquinas accionadas por energía, la aparición de nuevas materias primas como
el algodón y el hierro, desarrollando la industria textil y la construcción de
los ferrocarriles. La segunda, de la mitad del siglo XIX hasta la I Gran Guerra,
en Cataluña aparecieron sectores como el eléctrico, la construcción y la
metalurgia que se vio favorecida por la repatriación de capitales ganados en
las colonias por los "indianos".
Me atrevería a decir que la tercera revolución
llegó a finales del siglo XX con la tecnología de comunicación por Internet y
las nuevas fuentes de energía renovables. Recordáis el antes y el después de
las Olimpiadas del 92? La estación de telecomunicaciones para retransmitir los
juegos nos permitió dar un salto inimaginable. Ahora ya estamos en la cuarta
revolución donde todo es posible. Ya no hace falta ser adinerado para poner un
negocio en marcha. Hace falta imaginación, inventiva, creatividad y preparación.
Y con la globalización, los jóvenes recién salidos de las universidades
comienzan negocios casi como un juego y los hacen rentables como nunca hubieran
soñado. Se refiere a las redes sociales, la robótica, las aplicaciones en los
móviles, el comercio en línea, etc. La mayoría de las start-ups, empresas de
nueva creación con grandes posibilidades de crecimiento y fuerte componente
tecnológico relacionadas con el mundo de Internet y las TICs, utilizan otras
nuevas formas de financiación al margen de las entidades financieras
tradicionales. Crowdfounding, a través de una plataforma, el emprendedor logra
en un tiempo acotado la financiación de un colectivo de gente que se unen a
cambio de algo simbólico, haciendo posible la ejecución de su proyecto. Playfunding,
los emprendedores subirán su proyecto, manteniéndose a la espera de que una
empresa los "patrocine". Crowdlending, mediante páginas avanzadas en
el crowdfunding, las empresas ofrecen una rentabilidad o un tipo de interés
alto a los inversores potenciales.
Crowdsourcing, en una Marketplace, las
empresas abren una convocatoria sobre una tarea específica a un número
indeterminado de personas, y pueden elegir los más apropiados para desarrollar
esa tarea. Ya no vale seguir en la zona de confort. Ya no se puede vivir
pensando que vamos a mantener el estatus para siempre. Tenemos que estar
abiertos al cambio y si puede ser, debemos promoverlo para no quedarse atrás y
ser tragados en el camino. Ahora cualquier invento está a disposición de todo
el mundo, se comparte, ayuda a crear otros nuevos, no como antes que se
guardaban como secreto con llave. Ninguna industria se escapa al cambio y las
oportunidades son infinitas. Sólo hay límites a nuestra mente. Es por ello que
las empresas que trabajan con equipos pequeños, con mentalidad abierta y
cohesionados, creativos y con un liderazgo innovador, explorando nuevas
expectativas, sin olvidar el funcionamiento del día a día, son las que podrán
salir adelante. La población no crece en todo el mundo, envejece y los gobiernos
son incapaces de solucionar el problema que ya se ha planteado con un paro en
alza y unas pensiones no garantizadas a la baja. Los directivos formados bajo
principios de estrategia pensada para organizaciones verticales y orientadas al
control, al mando y en la obediencia, que reproducen estructuras militares,
fueron un paradigma que dio la dirección clásica de la era industrial. Hoy las
direcciones empresariales están recibiendo un giro sin precedentes. La
innovación conlleva esfuerzo, por supuesto, pero también oportunidades.
traducción de 3 columnas de artículos en el semanario el 3 de vuit